EL MODELO*
A finales de la década de 1920, Gustav Schumacher dirigió un negocio
llamado “Schumacher Motor Service” en la ciudad de Yonkers, cerca de
Nueva York. Se caracterizaba por ser una persona
talentosa en el campo de la ingeniería de la automoción y sus
trabajos de diseño y metalurgia. Lo que no se sabe es si él era
conocedor de los intentos de Frank Lockhart por alcanzar el
récord mundial en la playa de Florida el 25 de abril de 1928.
Para su carrera sobre la playa en la playa de Daytona, el propio
Lockhart diseñó un coche especial con un diseño extremadamente
aerodinámico. Este coche supuso entonces algo definitivamente
sensacional. Lockhart llamó a su coche de carreras “Stutz Black Hawk
Special Streamliner”, que mostraba el hecho de que el coche se basaba
en un chasis de la compañía Stutz. Los esfuerzos de
Lockhart finalizaron trágicamente cuando murió en un accidente
durante su prueba. Pero esta tragedia no disuadió al hijo de un
potentado empresario de Nueva York de presentarse en las oficinas de
la compañía Schumacher Motor Service y de consultar a Gustav
Schumacher por la posibilidad de diseñar y construir para él un coche
similar al que consiguió el récord mundial en 1928. El verdadero
trabajo de Gustav Shumacher empezó justo después de la compra del
chasis y del motor. Dibujó un coche convertible, que estaba fuertemente
influenciado por el diseño del coche del
récord de Lockhart. Debido al colapso del mercado de valores, los
consumidores adinerados perdieron gran parte de su riqueza, y no era ya
posible financiar este proyecto, y Gustav Schumacher
terminó el proyecto sin tener un consumidor para su automóvil
especial.
Sin embargo, el inteligente mecánico convirtió una necesidad en
virtud, y continuó construyendo el coche para sí mismo y lo utilizó
hasta mediados de los años 30.
*Nota: el texto de este apartado pertenece a Autocult GmbH. Para ver esta y otras miniaturas de esta marca, pinchad en este enlace.
LA MINIATURA
A mediados del año 2018, AutoCult lanzó al mercado esta curiosa y extraña miniatura de un modelo único, el desaparecido Stutz BB 145 Schumacher. Se trata de una maqueta fabricada en resina, en edición limitada a 333 unidades, siendo la que obra en nuestro poder la número 39. La miniatura es uno de los máximos exponentes de la buena calidad y del cuidado por los detalles que expresa la casa alemana en cada una de sus maquetas, lo cual se refleja en la solvencia a la hora de reproducir la multitud de pequeños detalles que tenía el modelo real, tales como los pequeños faros, casi camuflados entre el predominante color plata del coche, el motor, tubo de escape, bocinas, volante, retrovisores o la tapa del depósito de combustible. También merecen especial mención los guardabarros de espejo y las preciosas llantas de radios negros y bordes cromados. Por último, destacar la reproducción de todos los remaches a lo largo y ancho de la carrocería, que dan, cómo no, una mayor sensación de realismo y semejanza al modelo original.
Sin embargo, en este caso, preferimos no extendernos demasiado, mejor dejamos que las fotos hablen por sí solas...
CARACTERÍSTICAS:
-Marca: Stutz
-Modelo: BB145 Schumacher Special
-Escala: 1/43
-Fabricante: AutoCult
-Calidad: excelente
-Precio: 89,95€
FOTOS
una delicia, gracias por compartir.
ResponderEliminarpregunta: se sabe qué cosa es el palito con pelotita blanca en la punta situado por delante del radiador?
Gracias a ti por pasarte por el blog. Pues sinceramente no lo sé, dada la longevidad del coche, quizás fuera algún dispositivo para arrancarlo...
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